Cómo hacer pisto casero fácil, saludable y rápido

En este post descubrirás cómo hacer pisto, una receta tradicional de la cocina española que nunca pasa de moda, en su versión más saludable: ¡sin freír los ingredientes! 

Hacer pisto es una forma ideal de aprovechar las verduras y hortalizas que tenemos en casa. Además, puedes conservarlo en tarros o en el congelador y utilizarlo en otras recetas. 

¿Sabías que existen muchos tipos de pisto? La receta varía según el lugar donde se prepare, tanto dentro de la geografía española como fuera. Aquí tienes una muestra de ello:

• El pisto manchego se cocina con cebolla, pimiento, tomate y calabacín. 
• El pisto andaluz incluye patata y berenjena. 
• En Francia se llama ratatouille y, además de incluir berenjena, se presenta con las verduras cortadas en láminas finas.
• En Oriente Medio se prepara un pisto picante y muy especiado llamado shakshuka, que suele servirse con huevo.

Cómo hacer pisto en casa fácilmente y sin ensuciar

Por lo general, tendemos a pensar que las recetas tradicionales requieren mucho esfuerzo y tiempo de preparación, pero cocinar pisto en casa es muy fácil y rápido. Y no solo eso, ¡puedes prepararlo prácticamente sin ensuciar! 

Solo necesitas el Estuche de Vapor Hondo y el microondas.

Receta de pisto casero

Ingredientes

• 150 g de cebolla
• 100 g de pimiento verde
• 100 g de pimiento rojo
• 2 tomates (al natural o ya triturados)
• 150 g de calabacín
• Sal
• Pimienta negra
• Aceite de oliva virgen extra

Elaboración

1. Lava todas las verduras y trocéalas en cubos pequeños. Antes de cortarlas, quita las semillas de los pimientos y, para obtener una textura más suave, pela los tomates y el calabacín.
2. Pon la cebolla, con 1 cucharada de agua y una de aceite de oliva virgen extra, en el Estuche de Vapor Hondo, y cuécela al microondas durante 2 minutos a máxima potencia (800W).
3. Una vez transcurrido ese tiempo, saca el Estuche de Vapor Hondo del microondas y añádele los pimientos rojo y verde. Remuévelo todo bien y cuece los ingredientes durante 8 minutos más.
4. Si usas tomates enteros, tritúralos mientras se cuecen los pimientos.
5. Incorpora el tomate y el calabacín al Estuche de Vapor Hondo, junto con la sal, la pimienta y un poco de aceite de oliva. Remueve bien la mezcla y cuece los ingredientes durante 6 minutos más.
6. Mézclalo todo bien y sirve el pisto.

 Cómo servir el pisto casero

Ahora que ya sabes cómo hacer pisto en casa, solo te falta conocer el mejor ingrediente para acompañarlo: el huevo. Para que el plato sea más saludable, sustituye el huevo frito tradicional por un huevo poché o escalfado. 

Preparar este tipo de huevos puede resultar complicado, pero con el Escalfador de Huevos los tendrás listos en 3 minutos y sin esfuerzo. Descubre cómo usarlo en este vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=pdeMaFm1bQc 

Otro acompañamiento tradicional para el pisto es el pan. Recuerda que el pan integral suele ser más nutritivo y aporta menos calorías.

 ¡Pero eso no es todo! Puedes servir tu pisto casero de formas muy distintas. Aquí tienes algunas ideas:

• Úsalo como salsa para acompañar arroz, quinoa o pasta.
• Sírvelo como guarnición para acompañar carnes y pescados.
• Rellena de pisto empanadas, crepes, aperitivos u otras verduras, como las berenjenas o calabacines.
• Añádele soja texturizada para incluir proteínas a la receta sin que deje de ser vegetariana.

Ventajas nutricionales del pisto casero

Cocinar en casa tiene muchas ventajas. En el caso del pisto, te permite variar los ingredientes y el tipo de cocción para crear una receta saludable y muy rica. 

Estas son las ventajas de preparar tu propio pisto casero con el Estuche de Vapor Hondo:

• Puedes decidir qué cantidad de aceite quieres incluir en la receta y elegir un aceite de oliva de calidad. ¡Grasas saludables!
• Evitas el uso de aceite de girasol, muy habitual en las preparaciones listas para calentar y servir del supermercado, y que es un aceite refinado.
• Te ahorras el azúcar añadido que acostumbra a usarse para rebajar la acidez de la preparación y como conservante.
• Controlas la cantidad de sal. Puedes reducirla sin que el pisto quede soso añadiendo más pimienta.
• Puedes añadir o sustituir verduras por las de temporada o las que más te gusten.
• Logras una receta saludable y sin demasiadas calorías.

Si haces más pisto del que puedes comer, puedes congelarlo y disfrutarlo otro día. Si lo congelas en bolsas reutilizables de silicona, además, evitas los plásticos de un solo uso.

¿Te animas a preparar tu propio pisto? Hazlo en casa, en pocos minutos y con los ingredientes que más te gusten. Ahora que sabes cómo hacer pisto casero y adaptarlo a tu dieta, es el momento ideal para probar tus propias versiones.