Tapas de silicona adaptables: conserva tus alimentos correctamente
Por Catherine Trenchs
¿Has utilizado alguna vez tapas de silicona adaptables? Son una alternativa cómoda y sostenible a los plásticos de un solo uso para conservar, almacenar y mantener los alimentos frescos. Descubre sus ventajas y con qué tipo de alimentos las puedes usar.
¿Por qué utilizar tapas de silicona adaptables para conservar los alimentos?
Las tapas de silicona adaptables tienen múltiples ventajas frente al papel film convencional. A continuación, te presentamos algunas de ellas:
1. Permiten conservar los alimentos de manera sostenible. Como son reutilizables, evitarás los plásticos de un solo uso y cuidarás del planeta.
2. Crean un efecto de cierre al vacío que permite que los alimentos se conserven en buen estado durante más tiempo. Contribuirás a tirar menos comida.
3. Una conservación correcta evitará que proliferen las bacterias y que contaminen otros alimentos.
4. Las Tapas extensibles reutilizables de Lékué están fabricadas en silicona platino, un material seguro, resistente y libre de plásticos.
Kit Tapas extensibles reutilizables
Las Tapas extensibles reutilizables se pueden emplear con múltiples alimentos. Algunos de ellos son:
Frutas: las tapas reutilizables se pueden usar en cualquier tipo de fruta para evitar que se oxiden y que pierdan color y textura.
Ensaladas: si has preparado una ensalada y quieres conservarla, puedes ponerle una tapa de silicona y aguantará para la noche o hasta el día siguiente, siempre que la mantengas refrigerada.
Recipientes y raciones sobrantes: puedes tapar platos, boles... ideal para raciones que han sobrado.
¿Cómo guardar correctamente las sobras de comida?
Almacenar mal un alimento puede alterar su calidad. Es importante que, para evitar el deterioro de la comida, sigas algunos consejos de manipulación de alimentos para garantizar que tus platos se conserven en perfecto estado. ¡Verás que son muy sencillos de seguir!
1. Asegúrate de que tanto tus manos como los utensilios que vayas a utilizar estén bien limpios antes de tocar el alimento que quieres conservar.
2. Busca siempre una tapa de silicona del tamaño del alimento para que el cierre sea hermético.
3. Mantén el frigorífico limpio y ordenado.
¿Cómo puedes organizar la nevera según el alimento que vayas a conservar?
Cada alimento necesita un nivel de refrigeración diferente y, por ello, es importante que conozcas qué partes de la nevera son más o menos frías. De esta manera, vas a conservar mejor los alimentos en la nevera.
- Puerta: es la zona menos fría de la nevera. En ella puedes guardar huevos, líquidos, mantequillas, leche, zumos o mermeladas.
- Parte superior: junto con la puerta, es también la parte menos fría de la nevera. Puedes colocar ensaladas, conservas abiertas y, en general, alimentos que no necesiten demasiada refrigeración.
- Zona central: es ideal para conservar yogures, quesos o alimentos preparados, como por ejemplo un tupper con arroz o con pisto.
- Parte inferior o primer cajón: es la zona más fría del frigorífico. Por tanto, es ideal para colocar materias primas crudas como carnes o pescados.
- Cajón para frutas y verduras: ten en cuenta que las frutas no necesitan refrigeración, a menos que quieras consumirlas frías. Las frutas tropicales, el aguacate y el plátano nunca hay que refrigerarlos, ya que las bajas temperaturas impiden que maduren correctamente y hacen que se queden duros y sin sabor.
¿Aún no te has decidido a utilizar tapas de silicona reutilizables? En cuanto empieces a usar las Tapas extensibles reutilizables de Lékué, verás lo prácticas que son. Además, notarás que los alimentos se conservan mejor y, lo que es más importante, reducirás la cantidad de plásticos de un solo uso que van directamente a mares y océanos. No te lo pienses más, ¡forma parte del cambio!
