Té rojo: propiedades, beneficios y recetas para tomarlo
Por Julia Morell
El té rojo o pu-erh es un tipo de té proveniente de una región de China, que puedes disfrutar de muchas formas diferentes. Gracias a las propiedades del té rojo, también cuidarás tu salud. Si quieres saber más sobre este té tan especial y cómo puedes introducirlo en tu alimentación sigue leyendo. ¡Te lo contamos todo!
Características y propiedades del té rojo
El té rojo se diferencia de otras variedades de té por su recolección, ya que se deja fermentar y no se toma fresco. Al igual que sucede con el vino, en el pu-erh suele haber añadas, y cada una cuenta con diferentes características.
Suele comprarse en bolas compactas, también llamadas “ladrillos de té”, que se deshacen a la hora de prepararlo. Su nivel de teína es bajo, por lo que podrás beneficiarte de la estimulación sin caer en el nerviosismo.
Entre las propiedades del té rojo cabe destacar que es rico en polifenoles como catequinas o teaflavinas, lo que lo convierte en un excelente antioxidante que protege las células del envejecimiento y de los radicales libres.
Junto con una buena alimentación, funciona como quemagrasas, además de reducir los niveles de azúcar en sangre y ayudarte a regular el colesterol malo.
Trucos para incluir el té rojo en tu alimentación
Existen diversas formas de tomar el té rojo. A continuación te presentamos desde las más clásicas a otras más diferentes y originales. ¡Toma nota!
Relájate y prepara tu té con el Calm at Home
Sin duda, una de las mejores formas de disfrutar de los beneficios y propiedades del té rojo es tomándolo infusionado en nuestro Calm at Home.
Llena una de las jarras de tu Calm at Home hasta el punto que se marca en el recipiente.
Caliéntala en el microondas a máxima potencia (800 W) durante 2 minutos.
Deshaz con las manos una porción de té rojo y añádela a la jarra.
Coloca el tubo y la otra jarra, y espera unos minutos hasta que se infusione.
Después, agarrando la jarra por la parte central, dale la vuelta.
Espera un poco y disfruta de tu té.
Si lo quieres un poco más dulce, puedes ponerle una rama de canela.
Refresco de té rojo
Si queremos tomar té rojo en verano o cuando hace mucho calor, lo mejor que puedes hacer es prepararlo en forma de refresco bien fresquito. Así es como lo puedes elaborar:
Infusiona dos raciones del té como te explicamos en la receta anterior con el Calm at Home y déjalo enfriar.
En una jarra grande pon el té, el zumo de medio limón y termina de llenarla con agua.
Añádele un sobre de gasificante o bicarbonato. Le quitará la acidez al limón y le dará un toque refrescante.
Pon un poco de hielo en un vaso, añade tu bebida y disfrútalo en una tarde calurosa.
Smoothie de té rojo, mango, plátano y jengibre
Otra opción es preparar el té rojo en forma de smoothie, combinándolo con frutas y jengibre para darle todavía más sabor.
Infusiona una ración de té rojo como te explicamos en la primera receta con tu Calm at Home y déjalo enfriar a temperatura ambiente.
Corta un mango y un plátano en trozos y ponlos en una procesadora.
Añade un trocito de jengibre, previamente pelado.
Añade tu té y procésalo todo bien hasta que no queden trozos.
Puedes congelar el mango y el plátano antes si quieres una textura aún más cremosa. Sírvelo con semillas de chía y frutos rojos para tener una merienda o desayuno lleno de energía y nutrientes.
¿Sabías que el té rojo podía ofrecerte tantas preparaciones? Como puedes ver, no solo podrás disfrutarlo después de una comida por sus propiedades digestivas, sino que además puedes convertirlo en una receta deliciosa para tomar cuando más te apetezca. ¿Con cuál de todas te quedas?
